Quien da primero, da dos veces.

“Los paraguas hay que comprarlos cuando no llueve. Cuando empieza a caer agua son caros y probablemente te habrás mojado”. (Jacobo Zarco).

CIHEFE (Centro Investigaciones Historia y Estadística del Fútbol Español) adelantó sus conclusiones en una investigación realizada sobre la Liga 2016/17: “El equipo que abre el marcador en un partido es el que logra la victoria en un 69,69% de las ocasiones”. Dicho estudio estuvo a cargo de José del Olmo, historiador del fútbol. Y, concretó con este refrán: “Quien da primero, da dos veces”.

De los detalles manejados se cita que en 380 encuentros del pasado campeonato, acabaron en victoria unos 291 de unos de los equipos, mientras que los 89 restantes terminaron en empate. Por tanto, de los 291, en 246 el equipo que hizo el 1-0 o el 0-1 consiguió ganar. En 45 encuentros de toda la Liga se registró una remontada. Sin duda, fue un factor determinante en el cómputo general de la Liga.

El propio Del Olmo significa que “El primer gol no es un hecho aislado que se resuelve separadamente en cada partido”. Frente al 69,69% de las victorias para el que marcó primero, un 17,65% culminó en igualadas y un 12,75% fueron remontadas, al parecer esta cifra fue en aumento en las últimas cuatro temporadas. Si bien, existe la referencia de la Liga 2012/13 que ascendieron las remontadas al 21,97%.

CIHEFE precisa que el Real Madrid es el equipo que más veces se puso por delante en el marcador (30), le sigue el Barcelona (26) y el Villarreal (24). Por tanto, los entrenadores tienen ahí una cantera estratégica que explotar para conseguir resultados distintos. Incluso, me atrevo a más, tengo la sensación de que estas informaciones no son de conocimiento de los equipos ni de los entrenadores.

Lógicamente, estudios de esta naturaleza, son clarificadores para modificar, o iniciar, nuevas maneras de hacer. Hubo estudios anteriores en esta misma línea, distingo el de Javier Sampedro Molinuevo y Jaime Prieto Bermejo sobre “El efecto de marcar primero y la ventaja de jugar en casa en la liga de fútbol y en la liga de fútbol sala de España”. En aquellos estudios se analizaban si existe ventaja en el resultado de un partido en función de si el equipo que marca primero juega en casa o fuera de casa. Se habla del procedimiento de Pollard (1986), al fin y al cabo, se utiliza una métrica denominada “ventaja de marcar primero”. Llegando a la misma conclusión señalada al principio: “Los equipos que marcan primero obtienen más puntos que los equipos que encajan el primer gol”.

Las cuestiones de detalle son para eruditos, pero las conclusiones son muy clarificadoras para los entrenadores, aunque el comportamiento de los equipos denota que tales premisas no se conocen, o se ignoran sus conclusiones. Porque la mayoría de los equipos especulan con el juego en el inicio del partido, sin embargo, observemos el juego de los equipos cuando faltan 15 minutos porque todos los entrenadores que van perdiendo acaban poniendo más centrocampistas, o más delanteros, intentando cambiar la actitud de su equipo para que sus jugadores avancen y sean más agresivos en la portería contraria. Es curioso que, cuando lo tienen todo perdido, ya no les importa tomar mayores riesgos apostando por conseguir más goles propios y activando la ofensiva. Entonces, ¿qué hubiera ocurrido si esa actitud ofensiva se hubiera planteado desde el principio del partido? Es probable que se perderían menos partidos, incluso empatarían otros, pero es seguro que ganarían más encuentros…

Salamanca, 7. Agosto.2017.