De sistemas y otros asuntos sofisticados del fútbol

31.03.2021 00:00 de  MAROGAR .   ver lecturas

“Generalizar siempre es equivocarse”. (Hermann Von Keyserling).

             Con ese título firmaba Andoni Zubizarreta su artículo (ElPaís, 17.12.2020) apostillando de salida: “Como ya dijo hace mucho Cruyff, el fútbol no es estático, sino una cuestión de espacios y de movimiento. Un juego de posición. Y no hay nada más estático que un sistema”. (…) “Decía Johan que aquel 3-4-3 con el que jugábamos era solo un punto de partida, la letra A de nuestro abecedario. Pero la movilidad, la situación del rival, el momento del partido, nos deberían llevar a otras soluciones tácticas que él definía como B, C, D… Siempre con la condición de que si estábamos en dificultad o no encontrábamos la buena respuesta al rival siempre debía volver a la A. Y Johan era tan sabio en la lectura del juego que si necesitaba jugar con una línea de cuatro defensas lo hacía, porque siempre mantenía la misma idea del espacio, la posición y el movimiento. O decidía sacar a Alexanco para defender el maravilloso gol de Koeman en Wembley”.

            Aunque Zubizarreta le hace un guiño a su “entrenador-protector” de toda la vida, en este caso Javi Clemente cuya Selección siempre fue Zubizarreta y otros 10: “Con la España de Javier Clemente, cuando no teníamos el balón, nuestra estructura era de cuatro en la defensa, pero cuando ganábamos la pelota nuestro lateral se convertía en eso que luego hemos llamado carrilero largo (el Dani Alves del equipo de Pep) para abrir el campo y quedarnos con una defensa de tres. O les podría contar que Aimé Jacquet, seleccionador de Francia campeona del mundo en el 98, aquella de Zidane, Djorkaeff, Henry y Thuram, le agradecía a Clemente haberle hecho descubrir el 4-2-3-1- que les llevaría, como punto de arranque, a ser campeones y que veía por primera vez sobre el terreno de juego en la inauguración del Stade de France”. 

            “Un día hablaba con Claudio Ranieri, mi último entrenador en Valencia, sobre la posesión del balón; sobre si lo tenemos nosotros no lo tiene el contrario, y que así puedes atajar mejor y también defender, y todos esos conceptos del juego del Barça. Ranieri me escuchó con su elegancia habitual y luego me dio una lección de pragmatismo romano: “Veamos, Zubi. No tenemos jugadores para tener el balón y, además, ¿para qué quiero tenerlo un minuto con el riesgo de perderlo si en tres segundos puedo robarlo, controlarlo y lanzar rápido al Piojo López para que se la juegue uno contra uno, con su velocidad y la lentitud del central rival?”. Se acordará Van Gaal precisamente del Piojo cuando en un partido Valencia-Barcelona no fueron capaces de neutralizarlo, comportándose así como dijo Ranieri. “Pues eso, la idea del juego, la ocupación racional del terreno de juego, siempre gana al sistema”.

            Una vez más, las soluciones únicas en el fútbol no existen. Mascherano, recientemente, fue entrevistado en “The Tactical Room” y el ex jugador del Barcelona dijo: “Me duele que el Barcelona se haya alejado del modelo que le hizo grande. Que haya priorizado otras cosas y no se haya mantenido lo que tan grande y sobre todo tan diferente había hecho al club”. Como vemos, hay opiniones para todo lo que pasa es que nadie valora los condicionantes. Por eso, el viejo zorro Ranieri era tan pragmático e inteligente en su concepción del fútbol. Ahora que al Barcelona lo entrena Koeman y su dinámica también ha cambiado, con jugadores distintos, viene a decir: “No hay que obsesionarse con el sistema”. 

             Es curioso, Ronald Koeman llegó al Camp Nou en 2020 con la idea de utilizar el dibujo táctico 4-2-3-1-, o sea, el mismo que Zubizarreta señalaba antes que Javier Clemente enseñó al seleccionador francés que ganó el “Mundial98”. Pero es que, además, Koeman añadió: “Es clave tener jugadores versátiles en la plantilla. Se habla del sistema, pero lo importante es la libertad de cada uno de los futbolistas…” Lo cual aporta un perfil más flexible que es difícil reconocerle al holandés por actuaciones pasadas sobre todo en la etapa como entrenador en Valencia, quizás por entonces actuó más de “vengador” del presidente que de entrenador. 

             31. marzo. 2021.