¿Marcaje al hombre, una nueva tendencia del fútbol...?

16.09.2016 23:18 de  MAROGAR .   ver lecturas

En un programa de televisión del 29. agosto.2016, dejaban constancia del “marcaje al hombre” que Berizzo había impuesto en el partido del Real Madrid - Celta. El especialista Axel Torres ilustró algunas jugadas y marcajes específicos. Lo cual resulta muy interesante en estos foros acostumbrados a dar opiniones intrascendentes y vaguedades. Se puso el acento en ciertas evoluciones del Celta, concretando que el Celta había retrocedido 40 años en su concepción futbolística por decisión de Berizzo, antiguo colaborador de Bielsa en los años 2007/2010 con la Selección chilena.

Ya en 2014 (La Voz de Galicia) apuntó: “Berizzo reconoce que los suyos llevan a cabo marcas individuales pero dentro de su zona de influencia, no en todos los lugares del campo. Cuando eso sucede es que la permuta no se ha ejecutado del modo adecuado” (…) “El recurso del cambio de marca lo utilizamos para que cada uno defienda donde juega y juegue en donde defiende”, aclaró Berizzo. “Nosotros marcamos en la zona al hombre, pero no de una manera persecutoria en cualquier parte. Cuando eso sucede es porque el cambio de marca se dio mal. Me gusta que los atacantes tengan una marca preestablecida, que no tengan la libertad de generar peligro o acciones, y para eso se necesita de una cercanía y una agresividad en el uno contra uno decisiva, pero que el lateral derecho aparezca en el costado izquierdo significa que algo se hizo mal”…

La web infrafútbol magazine, dejó constancia en enero 2015: “Berizzo utiliza un sistema de marcaje mixto, con algunos jugadores marcando al hombre y otros en zona… Sin embargo, la importancia de las marcas al hombre ha ido creciendo con el paso de las jornadas y con ellas, los desajustes defensivos y el desgaste físico. Un ejemplo de ello, fue la modificación del sistema contra el Valencia. Centrado en el rival, Berizzo ideó un sistema de marcas dentro de un 3-5-2 (5-3-2 en fase defensiva) con prácticamente todo el equipo marcando al hombre”. (…) “Un modelo de juego que exige físicamente… Demasiada amplitud y profundidad en una fase ofensiva del equipo poco equilibrada y las interminables marcas al hombre en la fase defensiva, han acabado lastrando al equipo…”  También en el blog “Nunca salimos Campeón” se expuso: “El fútbol moderno de élite se viene caracterizando en los últimos años por sistemas defensivos zonales meticulosamente articulados, defensas posicionales presentadas en forma de repliegues a diferentes alturas o ambiciosas presiones sobre primeros pases... La vía alternativa a la elaboración de estos planes a la que se han acogido otros equipos para mostrarse competitivos al más alto nivel, es la del diseño de posesiones de calidad, largas cadenas de pases que les permitan llevar el balón a zonas muy avanzadas para que sea allí donde tengan lugar las pérdidas ante un rival desordenado y desorientado, al que poder encimar con un agresivo e inmediato pressing para recuperar con inmediatez”.

Y precisó además: “Lo realmente paradigmático del grupo “bielsista” es el marcaje que propugnan para los momentos en que sus equipos no tienen la pelota, totalmente contracultural en esta época. Los fundamentos son claros: presión intensa hombre a hombre. ¿Espacio? Toda la cancha. ¿Tiempo? Desde el momento de la pérdida hasta el de la recuperación”. Augusto Fernández, actual futbolista del At. Madrid, explicaba: “El rival sabe que siempre tendrá un hombre constantemente atrás marcándolo y que no lo va a dejar girar fácilmente. Ante cualquier error del rival estas ahí para quitarle la pelota y salir”. Y como en todo marcaje individual, los problemas aparecen cuando el rival supera la marca individual. Decía el “Loco Bielsa”: “El sistema defensivo consiste en tener un defensor más que la cantidad de atacantes que presente el rival. Siempre será así. Poner defensores propios donde el rival pone atacantes y también tener siempre un hombre de respaldo para tratar de obtener con esa superioridad numérica defensiva algo de solvencia y seguridad”. Es lo mismo que propugna Berizzo…

Insistía Augusto: “La cuestión de la perseverancia en las marcas, a saber,  hasta dónde hay que seguirlas: “si nuestro lateral se queda con su hombre en la banda yo tengo que seguir a mi hombre. Si el rival que está en la banda con nuestro lateral se viene al medio y mi hombre se va a la banda, si hay tiempo, cambiamos de hombre. Si no hay tiempo seguimos hombre a hombre”. No obstante, se asegura que Berizzo es más flexible en estas defensas alternativas que su maestro Marcelo Bielsa.

En cualquier caso, las controversias nos permiten debatir, flexibilizar ideas, en suma aprender de fútbol por cuanto las últimas tendencias “amarillistas” no están aportando absolutamente nada al mundo futbolístico…

Salamanca, 16 de setiembre de 2016