¿Reinventando los equipos... reinventamos la Selección? 3 de 4.

“No es la especie más fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que mejor responde al cambio”. (Charles Darwin)

Veamos la lista de goleadores españoles cuando aún faltaban diez jornadas para finalizar la Liga 2014/15: Alberto Bueno, 15 goles; Aduriz 11; Parejo 9; Sergio Garcia 9; Nolito 8; Juanmi 7, igual que Alcacer y Alvaro Vázquez; Vitolo 6 goles como Agirretxe y Barral… A la vista de las trayectorias de dichos jugadores, sus edades y la experiencia internacional de sus equipos, podemos deducir que las alternativas no están nada claras, cualquiera que sea el Seleccionador que entrene al equipo “España” en los próximos años… Así que ahora mismo debieran potenciarse las cualidades de Diego Costas y Morata; quizás acompañados de jugadores jóvenes con progresión evidente: Juanmi, Alcacer, incluso la sorpresa actual de Bueno en su excelente desempeño en el Rayo Vallecano y que ya suena para el Oporto portugués… Y una clave significativa de la Selección, sigue contando con el mayor bloque de jugadores procedente del Barcelona. Aunque Suárez clarifica: “La gente está acostumbrada al Tiki-taka, al juego lindo, pero hoy en día el fútbol es muy parejo y tienes que ser más directo y ser más contundente. Los barcelonistas tienen que acostumbrarse a sufrir”. El equipo “España” tendrá que variar también conceptos del juego utilizados hasta la fecha…

Todo ello de cara a una Selección futura con garantías de éxito… Y siempre esperando alguna sorpresa positiva que surja en el próximo periodo… ¿Quién pensaba, hace seis meses, que Gayá diera el rendimiento que está dando al Valencia en el lateral izquierdo? Pero, sobre todo, ha llegado el momento de incorporar otras soluciones tácticas, romper los esquemas habituales en la forma de jugar, también sabemos que la tortilla de patata se puede “deconstruir” y elaborar de otra manera para que no pierda las esencias y, sin embargo, gusta como la antigua tortilla de la abuelita… ¿No tenemos delantero centro, o extremo izquierdo, o lateral derecho? Pues busquemos alternativas creativas y no nos flagelemos buscando un cabeza de turco en el Seleccionador. Los equipos, la Selección, muchas veces tendrán que encontrar fórmulas como la de utilizar defensas, o centrocampistas, que lleguen al gol en la portería contraria. Será un ajuste en las actitudes actuales, buscando aptitudes fundamentalmente. Si Junior, Cafú, o Roberto Carlos,  tenían facultades para llegar arriba acompañados de mucho peligro de gol ¿Por qué no los vamos a incentivar en la línea ofensiva sin olvidarse de su misión principal? Por tanto, sería una buena alternativa que los futbolistas de la Selección, practiquen antes en sus equipos, lleguen más veces y con más claridad a puerta contraria, sus goles serían también oportunos, necesarios, incluso tienen que ir asumiendo tales responsabilidades. Iniesta juega ahora en el Barcelona 20 metros más atrás pero, ¿Por qué va a renunciar a subir más veces generando ocasiones de gol, bien por sí mismo o combinando con compañeros?

Nadie debería ampararse más en los goles de los delanteros centro o de otros delanteros, encontrando disculpas infantiles. Por tanto, busquemos iniciativas para que los Isco, Koke, Iniesta, Cesc, Mata, Silva, Cazorla, Pedro, Thiago, y jugadores de estas características consigan goles y no solo de libres directos o indirectos, llegando una y otra vez con actitud ofensiva, intentándolo… Ahora bien, si el Barcelona decidiera jugar con Pedro de defensa sería una mala decisión para la Selección y, casos como éste, pueden producirse a veces para garantizar al jugador unas posibilidades de jugar más… Una disección del fútbol es absolutamente necesaria, sin volvernos locos pero sin rasgarse vestiduras, se deben enriquecer las misiones y tareas de los distintos jugadores… Es una responsabilidad colectiva de “reinventarse” hacia un fútbol menos dependiente de especialistas, sobre todo de un delantero centro casi imprescindible en las tácticas modernas (Y también en las antiguas). Es una manera indirecta de buscar creatividad, el pensamiento lateral nos debe llevar a nuevas soluciones para el fútbol buscadas entre todos. La heterodoxia aporta alternativas, sería como esos entrenadores que, sabiendo que sus jugadores no defienden bien por alto y cometen demasiadas faltas incluso cediendo muchos saques de esquina, deciden aconsejar a los suyos que limiten las incorrecciones en vez de perder tanto tiempo en marcajes y tipos de defensa…

Todos deberíamos contribuir a dar confianza a los protagonistas del cambio. Porque, profundicemos aún más… En el Mundial 2014, Messi no hizo Campeón a su Selección de Argentina; Cristiano tampoco lo consiguió con Portugal; Neymar no llevó a buen término a Brasil; Suárez con Uruguay no pasó ni siquiera a la final; Benzema con Francia fue rindiendo muy gradualmente; y Bale ni fue a jugar dicho Mundial porque su país no se clasificó. Por tanto, el gol y los goleadores, exclusivamente, no son la solución única y definitiva… Aunque el equipo “España” tiene ahí un punto débil muy acusado, faceta que debe ajustar en su juego… Siempre pensé que Guardiola, Mourinho, Pellegrini, Rafa Benítez, Wenger, siendo entrenadores del máximo nivel, mejorarían a los jugadores españoles que entrenan con ellos. Pero, una vez más, se demuestra que las individualidades deben “ligar” unos con otros, complementarse, “reinventarse”, formar equipos cohesionados… Y un equipo cuesta integrarlo, organizarlo, los entrenadores no son brujos con pócimas secretas que echan las esencias en un cuenco y aquello funciona como una orquesta o un ballet bien coreografiado… Otros equipos españoles están mejorando su juego de manera notable: Valencia, Sevilla, Villarreal, Málaga; con lo que acabarán aportando jugadores a la Selección española no faltando mucho…

Sinceramente, creo que el estado de situación de la Selección española está en este tránsito. Y, quizás, debamos recurrir a libros especializados sobre la gestión del cambio, sobre el liderazgo a ejercer, etcétera. Me meto dentro de los textos de un especialista mundial como John P. Kotter que dispone de una amplia literatura. Y, entrando en materia, aplicaríamos las mismas técnicas de diseño organizacional que en una gran empresa. Dice Kotter que se suelen producir 8 errores típicos: 1. Complacencia, demasiada permisividad; 2. No crear una coalición rectora suficientemente fuerte; 3. Infravalorar la visión; 4. Dedicarle poco tiempo a comunicar, a señalar la visión; 5. Los obstáculos no pueden bloquear la visión; 6. No generar éxito a muy corto plazo; 7. No cantar victoria demasiado pronto; 8. Los cambios en la cultura deben afirmarse con fuerza.

Por otra parte, no es momento de mirar para otro lado, la idea de “reinventarse” le tiene que afectar al mundo del arbitraje: estructura, sistemas de formación, ascensos y descensos, fuentes de captación de talento, aplicación práctica de las Reglas en los partidos, actitudes y tendencias. Porque el arbitraje español tiene unas carencias y unos comportamientos poco transparentes, inmaduros, un tanto burocratizados que no se incorporan a la esencia del juego… Por otra parte, los árbitros y los estamentos oficiales se muestran distantes del resto de participantes, se bloquean en su “Torre de marfil”, se consideran entes superiores que no quieren contaminarse con los demás, el vulgo que no se sabe el Reglamento… Y ellos también podrían ejercer una labor social importante, su labor formativa en ese espacio del fútbol sería fundamental, pero hasta la fecha no se sienten concernidos en esa misión…

Salamanca, 20 de abril de 2015.